martes, 7 de febrero de 2012

Ayudar, Conocer, Investigar en Medicina



Estas semanas han sido de una intensiva exposición al mundo universitario. El caso es que he participado en un seminario de casos clínicos  expuestos por alumnos de 6º curso tras su rotación obligatoria en Atención Primaria (pasada la adolescencia, ya encaran su  futuro como especialistas…y emigrantes) , he colaborado en la rotación y  seminarios impartidos  a los alumnos de   3º, 4º y 5º curso en una asignatura optativa de Medicina de Familia y, finalmente, he trabajado con  alumnos de 1º curso (casi adolescentes:18 años)  en una asignatura-  ¡obligatoria! - de “Introducción Precoz a la Clínica”, realizada íntegramente en AP, con rotación, clases y seminarios.

Y fue el día en que yo impartía un seminario en el centro de salud (en la facultad tenemos el resto de actividades) cuando, para facilitar la dinámica de grupo , les sugerí que señalaran los motivos para escoger medicina. Y estas fueron las tres clases de respuestas…todas previsibles. ¿O no?:

-Para "ayudar  a los demás" (la mayoría)
-Para "conocerme a mí mismo" (bastantes)
-Para "investigar y desarrollar una carrera científica" (pocos)

Sí, son datos cualitativos sin más utilidad que jugar a las impresiones. Posiblemente todos hayamos tenido una mezcla de estas 3 motivaciones al principio de nuestras carreras. Pero parecía que a todos les moviera una de ellas como eje motor principal en su decisión. Y juro que yo  ya veía en sus caras, en  su porte y en sus expresiones, al cirujano y al internista, al dermatólogo o al otorrino, al pediatra y al geriatra, al ginecólogo o al oftalmólogo. Quizás también ví  a un premio Nobel, no recuerdo bien.

Y también había médicos de familia, de los de verdad.
Y es bien cierto.

PS: nadie dijo que “para ganarme la vida satisfactoriamente”. Quizás el dinero no es un motivo decoroso que esté al nivel de los otros tres, sobre todo en esta adolescencia tardía de los 18 años. Cuando vengan las hipotecas y los hijos, ya cambiarán de opinión…o se marcharán al extranjero, donde  les traten con más consideración.